I hate myself for loving you

Ha sido rara esta semana... por suerte he tenido bastante trabajo, y también me he dado cuenta de muchas cosas mías. Lo más chistoso es que escribo "esta semana" y recién es martes, aunque para mi, como que los fines de semana no existen, todos los días son iguales en el sentido de que para trabajar, carretear, o lo que sea, cualquier día es bueno.
Por mi trabajo, siempre tengo la oportunidad de viajar bastante, y al mismo tiempo, de conocer gente a la cual uno no está acostumbrado a ver, como lo son la gente que hace el aseo, y es raro... anoche me di cuenta, además me tomé el tiempo de conversar un rato con algunas de esas personas, y me di cuenta de que viven como en otro mundo, esta bien que cada uno viva su vida, pero cuando uno se cruza con ellos en algún supermercado, mall o lo que sea, simplemente ni los mira, cuando en realidad gracias a ellos, uno puede caminar por lugares más limpios, cuidando la cultura de los incultos que creen que el suelo es un basurero. Lo otro que no se por que, pero siempre en la calle, ya sean vendedores, cantantes o lo que sea, siempre me hablan y me cuentan sus cosas... y como para eso siempre he sido paciente y nunca cortante, siempre les tomo atención a lo que me van a decir. Los más entretenidos siempre van a ser los más viejitos, tienen historias que uno ni se las imagina que podrían pasar... y aunque uno se las imagina imposibles, las cuentan con tal interés que al final uno al final se las cree. El sábado pasado, cuando iba a la casa de mis papas –en realidad a comer cosas ricas y lavar la ropa- me quede conversando en el paradero con un cantante de micro, de un proyecto –no se si del gobierno o de la intendencia- de hacer una especie de "casting" para todos los artistas callejeros para que puedan seguir trabajando y poder subirse a los transantiago –no tenía idea de que hay una agrupación sindical de artistas callejeros-... ojalá que sea cierto... en realidad varias veces he tenido la suerte de escuchar a muchos y muy buenos cantantes o músicos en la micro, que en realidad se ganan más de los 100 pesos que a veces uno les da... aunque he buscado en internet, no he podido encontrar nada referente al proyecto. Sería una lata.
A nadie le ha pasado que cuando le llega una mala noticia en la parte emocional, como que se activa para hacer otras cosas? La semana pasada me cayo una noticia que en realidad, me dejó muy cagao... mi reacción? Hice aseo en toda la casa, inclusive bañe al perro, justo por suerte salieron algunos trabajos fuera de Santiago, y después sólo bicicleta y un poco de moto que me pasaron por ahí... pero es raro, hace un tiempo, esto mismo me hubiera dejado poco menos que tirado en la cama sin hacer nada, pero ahora como que fue todo lo contrario, el San Cristóbal lo subí como nunca de rápido –aunque lo bajé como siempre de rápido, en eso no aprendo- y motivado a full con la pega... mañana parto al sur y espero llegar el viernes en la noche... para así el sábado salir de nuevo... aunque ahora me voy pa Farellones... acá esta el aire demasiado asqueroso... bueno, nunca a olido a rosas. Extraño darme una vuelta por Valpo, perderme mientras camino por algún cerro, dar una vuelta en lancha –es chistoso, al agua le tengo miedo, y en esas lanchas me recago de susto, porque siempre me dan la sensación de que se van a volcar, pero aún así siempre me doy un paseito- comerme una chorrillana en el Jota Cruz, y tomarme un bebestible en algún boliche perdido en el puerto...